AGROAREA ®
©1994-2018 | NIC.AR | Todos los derechos reservados. Prohibida su reproducción total o
parcial sin la expresa autorización de sus editores. Contenidos del web con deposito de
propiedad intelectual protegida según ley 11.723 de la República Argentina y aplicable
en tribunales Internacionales. AGROAREA es una denominación de origen agro web mundial y
hace valer sus derechos habientes desde 1995 a la fecha.
|
Por la crisis de SanCor, nuevos jugadores avanzan en
góndolas de lácteos
cronista.com
Mientras se define el destino de la cooperativa láctea, el grupo Mastellone, su
principal competidor, y otras marcas pymes y regionales ocupan el espacio vacante
La debacle por la que atraviesa Sancor está modificando el mapa del negocio lechero. La
emblemática cooperativa, cuya venta al grupo Adecco Agro aún no fue cerrada, anunció la
semana pasada que dejará de fabricar leche fluída. Recientemente dos de sus plantas de
quesos fueron compradas por otras firmas y hace dos años se había desprendido de su
línea de yogures y postres a manos de la aceitera Vicentín.
El espacio que dejó vacante se está repartiendo entre otros jugadores,
tanto nacionales como internacionales. En el mercado de la leche, la única compañía en
condiciones de tomar ese negocio es su principal competidora, Mastellone, con La Armonía.
La segunda marca del grupo dueño de La Serenísima, fue la de mayor crecimiento en lo que
va del año según un reporte de la consultora Kantar Worldpanel. El informe destaca que
la marca de lácteos ya se consume en el 26% de los hogares argentinos, habiendo sumado
280 mil hogares nuevos en los últimos 12 meses.
"En este caso, el ascenso de La Armonía tiene que ver con la caída de Sancor, pero
fundamentalmente con el cambio de hábitos de los consumidores frente a la pérdida de
poder adquisitivo, se vuelcan hacia segundas marcas, cuya diferencia de precios es
sustancial", analizó el especialista en consumo Damián Di Pace, titular de Focus
Market. Según esta consultora, el consumo de leche cayo 10% en el año, y el de quesos
20%.
En cuanto al negocio de quesos, el reparto del mercado está más disperso
entre varias empresas, la mayoría pequeñas y medianas, tanto de alcance local como
regional. "La retirada de Sancor dejó un vacío que están ocupando otras marcas,
que absorbieron la producción de leche como materia prima, y con eso amortiguaron un poco
la crisis del sector, que igual está afectado porque la caída del consumo es muy
grande", comentó a El Cronista Pablo Villano, presidente de de la Asociación de
Pymes Lácteas (Apymel).
Así la planta de elaboración de muzzarella de Sancor en Centeno, Santa Fe, fue adquirida
por la firma La Tarantela. Y la de queso azul en la localidad bonaerense de Charlone fue
comprada por San Gotardo. También aumentaron su participación la firma internacional
Saputo (con las marcas La Paulina y Molfino), Ilolay y Tregar, estas últimas tanto en
quesos como en dulce de leche.
En esta reconfiguración del mapa lácteo, hay marcas de alcance local que se
regionalizaron, y marcas regionales que extendieron su alcance a todo el país, o al menos
a los principales centros de consumo. Es es el caso de la pyme cordobesa El Puente, que
hoy comercializa sus quesos, leche y yogures en locales propios en Capital y Gran Buenos
Aires, y la bonaerense Vacalín, que hace lo propio con sus quesos, dulce de leche,
manteca y crema.
"Con la crisis, los consumidores se animan a probar marcas nuevas, y
eso nos ayudó un poco", destacó Villano, de Apymel. "También, ante el
desplome de las ventas en el mercado interno, que calculamos fue de un 30% en los últimos
tres meses, estamos viendo la posibilidad de ocupar espacios que Sancor dejó vacantes en
el mercado internacional", comentó.
Unas 30 firmas miembros de Apymel conformaron un consorcio de exportación. "En
nuestro volumen total de producción, lo que se exporta es un 10%, principalmente quesos
duros, suero, leche en polvo y dulce de leche. Subir la cuota de mercado nos ayudaría a
compensar la caída en las ventas internas, pero también nos preocupa la quita de
reintegros a las exportaciones -apuntó Villano-, ya que castiga a nuestra actividad que
es esencialmente creadora de mano de obra y valor agregado".
|