AGROAREA ®
©1994-2019 | NIC.AR | Todos los derechos reservados. Prohibida su reproducción total o
parcial sin la expresa autorización de sus editores. Contenidos del web con deposito de
propiedad intelectual protegida según ley 11.723 de la República Argentina y aplicable
en tribunales Internacionales. AGROAREA es una denominación de origen agro web mundial y
hace valer sus derechos habientes desde 1995 a la fecha.
|
Para enfrentar la fiebre porcina, China apuesta a las
grandes empresas
|| Jorge Castro || lavoz.com.ar
Tras el fuerte aumento en el precio de los alimentos generado por la peste
porcina, el gigate asiático subsidia la creación de grandes establecimientos
productivos.
El precio de la carne porcina, que es más de 60 por ciento del consumo de productos
cárnicos en la República Popular (57 kilos/per capita/año), aumentó 25 por ciento
entre julio y agosto, con niveles récord de hasta siete dólares por kilo.
Este fenómeno es el resultado directo del estallido de la fiebre porcina, que
ha provocado la caída de más de un tercio del rebaño de cerdos de China (230 millones
de cabezas han sido sacrificadas este año y serían más de 300 millones a contar de
agosto de 2018, cuando la peste se desató).
El consumo de carne de cerdo es un componente central de la tendencia de fondo de la
alimentación china en los últimos 15 años, que es el vuelco masivo de su población al
consumo de proteínas cárnicas. Esto a su vez, es consecuencia del aumento sistemático
del ingreso per cápita de la población, que se elevó 8,1 pro ciento anual en los
últimos 5 años y se duplica en menos de una década.
Suba de precio
El aumento del precio de la carne de cerdo no provoca un alza de la tasa de inflación,
que es sólo de 2,7 por ciento anual, debido a que el precio de los bienes y de la
energía que la componen mayoritariamente tienden a retroceder, con un nítido carácter
deflacionario, que surge del cambio tecnológico y del alza de la productividad que es su
consecuencia.
Lo que sucede es que el consumo de carne porcina es un elemento esencial de la dieta
cotidiana del pueblo chino, lo que significa que el alza de 25 por ciento de los últimos
dos meses, golpea de manera directa al bolsillo de los trabajadores.
La industria porcina tiene un valor de 128.000 millones de dólares en China, y produce 36
kilos de los 56 kilos que se consume. Es tres veces más que el volumen que tiene el
segundo consumo cárnico, que son los productos aviarios.
La peste porcina ahora se ha extendido al Asia, sobre todo a Vietnam,
duramente afectada, con pérdidas de 30/40 por ciento en su ganadería, y también a
Mongolia, Kazakstán, Camboya, Filipinas que ha sacrificado ya más de dos millones
de cabezas y Corea del Norte.
Dimensión
El Banco Asiático de Desarrollo (ABD) estima que ya son más de 5 millones de cabezas de
ganado porcino las que han sido sacrificadas en el continente; y la peste abarca todas las
provincias en China, con más de 140 brotes, con la excepción de la Isla de Hainan. No se
dispone todavía de una vacuna efectiva para enfrentar la letal peste.
China consumió 55 millones de toneladas de carne porcina el año pasado, la mitad del
total mundial; y produjo 54 millones de toneladas, 47 por ciento de la producción en el
mundo. La Unión Europea (UE) es el segundo productor mundial, con 21 por ciento; y
Estados Unidos el tercero. con 11 por ciento; y en cuanto al consumo, la UE es la segunda
del sistema global con 19 por ciento; y EE.UU el tercero con nueve por ciento.
De ahí que el estallido de la fiebre porcina en la República Popular haya
modificado drásticamente el mercado mundial de proteínas, y ha desatado una crisis de
demanda de características globales.
La situación en China se puede resumir en estos términos: la tasa de inflación
ascendió en junio a 2,7 por ciento anual, en tanto que el precio de los alimentos
aumentó 8,3 por ciento, debido a un auge de los valores de la carne porcina de 21,1 por
ciento, el mayor en tres años.
Aniversario
En 2019 se cumplen 70 años de la fundación de la República Popular (1° de octubre de
1949) por Mao Tse Tung que la proclamó en la Plaza de Tiannamen de Beijing. Por eso, para
el Partido Comunista Chino (PCCh), que es fuerza política dominante de la República
Popular, es una prioridad absoluta frenar y revertir el aumento del precio de los
productos porcinos.
De ahí que el Consejo de Estado haya lanzado un plan de subsidios de hasta U$S 700.000
para la construcción de nuevas y grandes unidades productivas, con capacidades de 100.000
o más de cabezas dentro del próximo año.
Claramente, el objetivo del gobierno chino es disminuir en gran escala el número de
pequeños productores, centrando el desarrollo de la industria cárnica porcina en las
grandes empresas, tanto de capital nacional como extranjero.
Es parte del esfuerzo de reconversión que la República Popular lleva adelante para
aumentar la productividad del sistema agroalimentario y centrarla en el desarrollo de las
grandes unidades productivas.
También aumentaran las importaciones de carne porcina del exterior, multiplicando por
tres o por cuatro las compras actuales (cinco millones de toneladas en 2018), en gran
parte financiadas por el nuevo programa de subsidios. El objetivo es que el precio de la
carne porcina caiga 30/ 40 por cienot en los próximos 12 meses.
Todo lo que se refiere al consumo de carne porcina es una prioridad estratégica para el
gobierno de la República Popular.
*Analista internacional
|